El cuarto capítulo de Gossip Girl, que transcurre entre el arte de la hípca y los excesos del pasado, ha estado poco movido en un principio, para luego ir animándose el capítulo desde que el padre de Chuck ve a su hijo reunido con Megan cazafortunas (conocida como Lily).
Venga, te echan de Gossip Girl. No, es coña, quería ver tu cara.
Georgina mola como RRPP en la búsqueda de la #FulanaPerfecta de Dan, Sage no merece quedarse en un tercer plano y el novio de Serena teniendo sexo en el pasado (y sin imágenes ni nada) con Lily cazafortunas (ha sido muy resultón, pero dado el nivel de la serie, pues es un pelotazo y todo), más algo de intriga sobre el padre de Chuck (que es un bicho ese señor, maldad nivel Queen V), han estimulado el capítulo.
Ya ha llovido cuando mencionar mi nombre era como mentar a Satanás.
Y en la parte final, tras reconcilaiciones de Serena y Nate con padre e hija, respectivamente, Serena borra un vídeo suyo con un tipo que Georgina vilmente le copió cuando le sostuvo el bolso y colgará en la web. ¡Serena, qué pardilla eres!
Nada, esto que voy a bajar Salvajes, y me sale Serena mancillando con Dan.
Pero otro pelotazo es el de Dan refugiándose en el hostal Waldorf.
Haciendo el casting para landlord de Melrose Place por si vuelve otra vez a la tele. Sería del estilo Sydney Andrews.
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